“Los estados jugarán un papel muy importante en la recuperación económica y los bancos centrales jugarán un papel clave en la generación y expansión de liquidez”, dijo el miércoles el funcionario.
En este sentido, dijo que los Bancos Centrales deben buscar una herramienta para que al mismo tiempo que se implementen políticas expansivas tengan el mayor multiplicador macroeconómico posible, tratando de asegurar que la inyección de liquidez que se le dé a la economía de tienen algunas vueltas de impacto en la demanda agregada.
Guzmán dijo que esto genera “desafíos” para las economías dado que esta liquidez expandida retorna, pero eventualmente llega a los activos financieros, mientras que en países como Argentina “hay que tener mucho cuidado con el tipo de activos a los que se dirige, especialmente la demanda de divisas”. extranjero “.
“En economías más avanzadas, lo que va a pasar, y de hecho ha pasado en 2020, es que esta fuerte inyección de liquidez a la economía empieza a presionar los precios de los activos financieros con consecuencias distributivas regresivas”., eso.
El Ministro de Economía participó hoy en la clausura de las Jornadas Monetarias y Bancarias 2020 en un panel cuyo título fue “Retos, objetivos e instrumentos de los Bancos Centrales en un nuevo contexto global”.
En economías como Argentina en las que aún no se ha construido una “estabilidad cambiaria suficiente”, en las que la expansión de la liquidez se canaliza a través de la demanda de divisas, generando presiones cambiarias y problemas de precios de las materias primas, la inflación en general.
Para Guzmán, en Argentina hay un “desafío” para restaurar “todas las funciones del dinero” porque el Gobierno ve el “valor” en la soberanía monetaria entendida como una “lógica macroeconómica” y no como un “argumento sentimental”.
“El hecho de poder tener una moneda que se convierta en un referente y que nos permita tener instrumentos de ahorro y financiamiento, y que de esta manera podamos ir hacia la solución de los problemas estructurales de Argentina con este modelo de bimonetarismo que “Contribuye a una mayor inestabilidad macroeconómica y la balanza de pagos”, dijo.