Director, intelectual, militante y político Fernando “Pino” Solanas, actualmente a cargo de la embajada argentina en la UNESCO en París, falleció a las pocas semanas de ser hospitalizado tras contraer el coronavirus.
Días atrás, el exsenador nacional había utilizado las redes sociales para anunciar que había infectado con covid-19 y que había sido internado en observación en un centro médico de la capital francesa.
“Amigos, todavía estoy en cuidados intensivos. Mi estado es delicado y me han cuidado bien. Sigo resistiendo. Con mi esposa Ángela, quien también está hospitalizada, queremos agradecer a todos por su apoyo. “No dejes de cuidarte”, escribió Solanas.
La noticia de su muerte fue confirmada por la Cancillería poco después de la medianoche del viernes. “Es una gran tragedia para Pino Solana. Murió en el cumplimiento de su deber como embajador de Argentina ante la UNESCO. Será recordado por su arte, su compromiso político y su ética siempre al servicio de una más “Un abrazo a su familia y amigos”, fue el texto elegido por la Cancillería para descargar.
Es imposible separar la carrera artística e intelectual de Pino Solana de su carrera política.
Comenzó como guionista de la mítica El camino a la muerte del viejo Real y su primera película fue nada menos que Tiempo de hornoel fresco gigante sobre los efectos del imperialismo en el país, que significó un quiebre en la producción cinematográfica nacional. Al año siguiente, 1969, junto con Octavio Getino, funda el Grupo Cine Liberación.
El siguiente paso, también entrelazado con la política, fue la realización junto con la de Getino Perón, actualización doctrinal sobre la toma del poder, una extensa entrevista al general Juan Domingo Perón durante su exilio en Madrid.
Durante el breve interregno demócrata de 1973 a 1976, filmó Hijos de Fierro, pero ya en 1975 tuvo que abandonar el lugar amenazado de muerte por Triple A. Tras sufrir un intento de secuestro se instaló en París, donde filmó el documental La mirada de los demás.
Volver a la democracia en Argentina fue el marco de sus ganadores Tangos … el exilio de Gardel, que introdujo en 1985, y Por supuesto, desde 1988, con el que ganó el premio al mejor director en Cannes.
En mayo de 1991, con Carlos Menem en la presidencia, dos desconocidos le dispararon tras criticar duramente el movimiento liberal riojano y unirse al partido de lleno en la lucha política.
En 1992 fue candidato a senador por la ciudad de Buenos Aires y un año después fue elegido diputado por el Frente Grande, que compartía con Carlos Chacho Álvarez. Así en 1994 el Frente ganó las elecciones en Buenos Aires por la Convención Constitucional nacida del acuerdo entre Carlos Menem y Raúl Alfonsín. Poco después, por altercado con Álvarez, abandonó el Frente y, enfocándose en el cine, presentó Travel and the Cloud, inspirado en el gobierno de Menem.
En 2003, introdujo Recuerdos de saqueos, el documental que cubrió las crisis de 2001 y 2005 La dignidad de nadie que recibió premios en Montreal, Venecia, Valladolid y La Habana.
Lejos del kirchnerismo, en 2007 fue candidato presidencial por Proyecto Sur, cuando obtuvo el 1,6 por ciento de los votos. Duro crítico de las políticas de transporte, en 2008 lanzó La próxima estación, una pintura devastadora de las condiciones del servicio ferroviario.
Más lejos del gobierno de Cristina Kirchner, fue elegido diputado en 2009 con el 24 por ciento de los votos, justo detrás de Gabriela Michetti, la candidata del PRO. En 2013, se unió a la UNEN con la Coalición Cívica Ari, la Unión Cívica Radical, Libres del Sur, GEN y el Partido Socialista. Junto a Fernanda Reyes, ganó la práctica contra Rodolfo Terragno y Alfonso Prat Gay, por lo que acabó siendo electo senador. Elisa Carrió era la líder de la lista de coalición en el Parlamento.
Fue senador nacional desde entonces hasta el 2019. Los dos primeros años se opuso al peronismo, pero con la llegada de Mauricio Macri a la Casa Rosada, fue modificando paulatinamente su relación con sus ex compañeros hasta incorporarse al puerto del Frente. de Todos, quien promovió resueltamente la posibilidad de una continuación de la codicia en el poder.
Fue el primer candidato a diputado por la CABA, obtuvo el 35 por ciento de los votos y antes de asumir el cargo acordó representar al país ante la UNESCO, pedido especial del presidente Alberto Fernández. Se trasladó a París, donde le alcanzó el coronavirus.