“Qué delicioso”, dijo Evo Morales cuando probó salmón ahumado, mascarpone y bliss de aguacate que servía de entrada a la residencia Olivo. Le siguió un salmón a la plancha con espinacas y yemas de huevo con “curvas” de papa con pimientos. Y el bizcocho fue Taten con crema de peras y frutos rojos. Pero plato principal desde precio celebrada el lunes por el presidente Alberto Fernández y el expresidente boliviano fue sin duda conversacion, que se estiró Dos horas y media.
La parte oficial y pública fue de agradecimiento mutuo: Evo Morales agradeció a Alberto Fernández por intentar sacarlo de Bolivia y salvarle la vida tras el golpe y el primer presidente elogió su lealtad a su pueblo “que no olvida”. los que no lo traicionan “.
Por lo más interesante era intimidad de la palabra en la que Dije Evo Morales ya que, como su vida estaba segura, comenzó a construir una estrategia para regresar al poder. El ex presidente, al que se le prohibió postularse para un cargo, tuvo que nominar a un candidato ganador. Y se dio cuenta de que el hecho de que Luis Arce fuera “un blanco” y no un miembro de los pueblos indígenas representando no solo a la mayoría del pueblo boliviano, sino que su base electoral iba a ser karta atu y no un obstáculo. Morales siempre supo que su gente votaría por a quién le decía porque confiaban en él, pero en la cena dijo, como se enteró. FaqjaI12, qué lo que más le costó fue convencer a los dirigentes del MAS de que esa era la candidatura y no otra que más oportunidades tenían que prevalecer. “Mantener la unidad fue un logro inconmensurable para Evo. Creo que no entendemos que esté en la cima de un Peroni”, dijo al diario uno de los presentes en la cena.
Además de Morales y el presidente, asistieron el secretario general de la CTA, Hugo Yasky, y el diputado Eduardo Valdés.
Moral mostró que feliz eso fue porque en Isallavi, ai la ciudad donde nació, nxori 97 por ciento de los votos. Dijo que lo más probable es que su hijo se quede a vivir en Argentina y agradeció al “Presidente, al Estado y al pueblo” la ayuda recibida. sus convencido de que Fernández le salvó la vida y le agradeciste en uno Pío al “hermano Alberto“.
muchos recordó a Néstor Kirchner “para su amistad y apoyo al proceso de cambio en Bolivia“y expresado”amor y agradecimiento ”a la fallecida expresidenta y vicepresidenta Cristina Fernández. A través de Yasky, Morales también agradeció a “todas las organizaciones sindicales y movimientos sociales su solidaridad con el pueblo boliviano en el camino hacia la construcción de una Gran Patria”.
UN A través de su cuenta de Twitter, el presidente Fernández felicitó a Luis Arce (MAS) por su triunfo en las elecciones presidenciales de Bolivia y destacó que su triunfo es “una buena noticia para los que defendemos la democracia en América Latina” y eso demuestra “la gente no se olvida de los que no los traicionan“.
Evo Morales está en Argentina desde el 12 de diciembre de 2019., cuando se le concedió asilo político luego de pasar varios días en México en las mismas condiciones. Poco antes, el 23 de noviembre, dos de sus hijos habían llegado a Buenos Aires, a petición de Fernández (entonces presidente electo) a Mauricio Macri, por lo que en sus últimos días como Consejero Delegado allanaron el camino. para darle a salvar a tu familia.
El mundo es injusto, pero a veces en la política y en la vida lo que se da sin esperar nada a cambio tiene recompensa. Cuando Alberto Fernández decidió activar todos sus contactos internacionales para sacar a Evo Morales de Bolivia para que no lo mataran, lo hizo porque sintió que era lo que tenía que hacer. No tuvo la bola de cristal que pronosticó que menos de un año después, su ayuda se convertiría en parte importante de la estrategia que permitió la restauración de la democracia en el país vecino y el triunfo del MAS que ahora le llega al Presidente como un anillo en el dedo. para no ejecutar un solo gobierno popular en una América Latina que se dirigía peligrosamente de derecha. Por eso, el lunes, a pesar del coronavirus, el difícil momento por el que atraviesa Argentina, hubo muchos motivos para celebrar.