Como cada vez que habla en público, Mauricio Macri volvió a agitar las aguas de Juntos por el Cambio. El expresidente salió en un intento por aprovechar la movilización del domingo y, aunque elogió a Horacio Rodríguez Larreta, mencionó a otros líderes, entre ellos Patricia Bullrich. Y dedicó una crítica mal disfrazada a sus antiguos dueños Emilio Monzó y Rogelio Frigerio. De ese sector vinieron a contestar que sin ellos no tendría leyes. Larreta y María Eugenia Vidal guardaron silencio durante la marcha y perdieron el aumento que hizo ayer JxC. En las afueras del jefe de Gobierno porteño, destacaron su “autocrítica” (también que dijo que “no se ve a sí mismo como un candidato”). Otros volvieron a ver la preocupación de Macri cuando habló: “Para los líderes de la provincia, es abrazo de oso“Hablaron de su mala imagen. En cualquier caso, tendrán que acostumbrarse: Macri planea hacer al menos tres entrevistas más en los próximos días.
Para coronar una jornada de protesta contra el Gobierno -y con la incuestionable intención de aprovecharla-, Macri dio su primer reportaje a un medio argentino. Además de apuntar a Cristina Fernández de Kirchner y pedir el fin de la cuarentena, el expresidente compartió la culpa del fracaso de su administración: insistió en que la debacle económica fue resultado de las PASO y también mostró el “brazo político” de su gobierno: “Nunca debí haber delegado negociaciones políticas. Lo delegué en mi ala más política con los pro peronistas tanto en la Cámara de Representantes como en los gobernadores.“Fue una crítica por nombre y apellido: la Cámara de Diputados la dirigía Monzó y la relación con los gobernadores la dirigía Frigerio.
La respuesta no la formula directamente Monzó o Frigerio. En cambio, el diputado hizo Sebastián García de Luca, El ex número dos de Frigerio en el Ministerio del Interior y cerca de Monzos. “Gracias a Monzó y Frigerio pudimos tener las leyes más importantes y construir gobernabilidad“Le respondió a Macri”. Sancionamos el Consenso Fiscal, la actualización del Fondo Suburbano, las reformas institucionales. “Todas estas decisiones fueron aprobadas por el presidente en ese momento”, dijo.
De Luca también recordó que “Rogelio y Emilio lograron convencer a Pichetto de ser amigo del candidato en las últimas elecciones. “Como en 2014, con UCR y Carrió, a pesar de la resistencia interna del PRO para formar Cambiemos. Y aprovechó para pasar los viejos proyectos de ley a Marcos Peña y sus dos amigos, Gustavo Lopetegui y Mario Quintana”. Gestión y estrategia. La política se definió en la Sede del Gabinete, sus ‘ojos y oídos’, como la definió Macri. “No fuimos nosotros los que tomamos esas decisiones”, dijo.
También cuestionó el discurso de Macri apuntando a la polarización con el vicepresidente. “Nunca lo miramos como especulación electoral, siempre buscamos el diálogo, el consenso y buscamos acuerdosDijo De Luca. En el ambiente de Monzó, mostraron que hay pocas posibilidades de que sigan en el mismo espacio político que Macri.
En PRO, devolvieron las acusaciones: Señalaron que lo de Macri era acusar a Monzó que está pasando por los consejos de discusión tratando de romper todos los bloqueos Juntos por el cambio.
Definiciones y tensiones
Entre las definiciones de su espacio político que dejó Macri el domingo, la principal fue reducir la posibilidad de una candidatura a diputado por la Ciudad de Buenos Aires, algo que temen los diversos sectores de la coalición: “No me veo a mí mismo como candidato. Me siento cómodo acompañando a quienes tienen una profesión que liderar“En ese momento, elogió a Larretta, su principal oponente por liderar el espacio, pero luego agregó otros nombres:”Miro con gran alegría el crecimiento y consolidación de Horacio, en su primera experiencia de no estar bajo mi paraguas. También Patricia Bullrich, María Eugenia Vidal, Omar de Marchi, Federico Angelini y otros líderes. “También estoy muy satisfecho con Alfredo Cornejo sobre el radicalismo, Mario Negri y mucho más”.
Quizás por eso, los dirigentes que trabajaban en el ejército de Larreta tuvieron una visión más positiva del discurso de Macri: elogiaron su “autocrítica” y que había dicho que no sería candidato. Otros lo comentaron “allí todavía le falta un poco más de autocrítica “. También les preocupaba cómo afecta al espacio: “Hay miedo al efecto adjetivo y imagen negativa que tiene en las afueras“.
Jefe del bloque PRO en Diputados, Cristian Ritondo, Considere eso “el expresidente ha hecho una autocrítica de lo que considera errores de gestión y esto imposibilitó la reelección, principalmente en temas económicos y políticos. Nunca hemos visto a un expresidente hacer pública una autocrítica con sinceridad y realismo. Varios dirigentes lo elogiaron por separar al peronismo del kirchnerismo.
Uno, importante en el ejército porteño, explicó a este diario que había observado a Macri “moderado y prudente”. “Para algunos puede parecer duro. Pero, en privado, no pueden imaginar las cosas que dice”, dijo. Lo cierto es que tendrán tiempo de seguir comentando: Macri tiene planeado un atentado en la entrevista en los próximos días.
Aparte del discurso del expresidente, lo que generó tensiones en el JxC fue la movilización del 12O. Las diferencias en la bandera eran obvias: Mientras Bullrich participaba triunfalmente, Elisa Carrió advirtió que no llamaba porque “no quiere ser parte de los extremos de Juntos por el Cambio”. Posteriormente, la Coalición Cívica emitió un comunicado en el que aclaró que apoyaba la manifestación, pero que los dirigentes no debían levantarse en ella. Todo lo contrario de lo que hizo el presidente del PRO.
Ayer por la mañana se realizó la habitual reunión juntos por el cambio a través de Zoom. Macri conectó, al igual que Bullrich. Los que no estuvieron fueron Vidal y Larreta: ambos también callaron durante la movilización. En el entorno de Vidal, ni siquiera quisieron comentar lo que dijo Macri. Cerca de Larreta aclararon que se perdió la reunión por cuestiones de “su agenda de gestión”.