Argentina vota a favor de una resolución de la ONU que condena la situación de los derechos humanos en Venezuela, de acuerdo con el informe elaborado por el Alto Comisionado Michelle es soltera. En un comunicado, la Cancillería detalló que las posiciones adoptadas durante la reunión de este martes de Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra estuvieron bajo la instrucción expresa del presidente Alberto Fernández, para despejar cualquier duda. Además de votar a favor de establecer una misión permanente de las Naciones Unidas en Caracas e investigar las denuncias de las presuntas víctimas, Argentina también expresó su rechazo a los “bloqueos y sanciones” que “atacan específicamente al pueblo venezolano”.. Pese a este comentario, el voto argentino generó críticas dentro del oficialismo. como las expresadas por la embajadora designada en Rusia, Alicia Castro.
En su discurso ante la comisión, el embajador argentino Federico Villegas Beltrán elogió los “resultados positivos” de la cooperación mostrada por el gobierno de Nicolás Maduro con el trabajo de Bachelet, pero argumentó que el informe presenta “un reconocimiento insuficiente por parte de las autoridades venezolanas de su responsabilidad por la situación de derechos humanos en su territorio”. Esta resolución fue aprobada por 22 votos a favor, 3 en contra y 22 abstenciones, entre las que se encontraba México.
La posición argentina fue analizada durante el fin de semana en reuniones con la participación del Ministerio de Relaciones Exteriores -Felipe Solá, Pablo Tettamanti y Guillermo Justo Chaves-, que el Canciller concluyó este lunes en conversaciones con Fernández y el Secretario de Asuntos Estratégicos belga . Allí coincidieron en que hubo una posición histórica de la Argentina en la protección de los derechos humanos que es reconocida mundialmente y que debe ser respetada. En el caso específico de Venezuela, la posición de Naciones Unidas es lo que ha logrado Bachelet.
Desde la campaña electoral, Alberto Fernández se refiere a este informe siempre que se le pregunta al respecto. Aun cuando aún era candidato y fue recibido en Bolivia por el entonces presidente Evo Morales, mantuvieron un intercambio de impresiones sobre la situación venezolana en la que Fernández recomendó que Evo leyera el informe del expresidente chileno. Este informe se actualizó el 25 de septiembre, donde nuevamente se habló de ejecuciones extrajudiciales y se pidió el desmantelamiento de las Fuerzas de Acción Especial de la Policía Bolivariana (FAES). Por esa época, Argentina se incorporó al Grupo de Contacto Internacional que encabeza el canciller europeo Josep Borrell, que tiene como objetivo encontrar una salida a la crisis venezolana, que el gobierno interpretó como obligándolos a actuar de acuerdo con países que integran ese Grupo. Tampoco quedó fuera del análisis, como se puede imaginar, que apenas ayer el FMI inició su misión en el país, bajo cuya dirección juega un papel crucial Estados Unidos, país con el que Argentina ya se había colocado en el bando contrario durante elecciones en el BID, que finalmente perdió.
En conversaciones anteriores también se valoró que algunos dirigentes peronistas mantienen una fuerte vinculación con el chavismo, en la medida en que la oposición y sus medios afiliados demonizan todo tipo de acercamientos, por lo que cualquier decisión debe considerar estas variantes. De hecho, hubo un precedente hace una semana cuando el representante argentino ante la OEA, Carlos Raimundi, evitó una condena a la situación venezolana, que se convirtió en titulares catastróficos como si fuera un apoyo. Efectivamente, explicaron a la Cancillería, lo que falló Raimundi en ese mensaje fue no mencionar el informe Bachelet.
Así quedó muy claro ayer cuando el país destacó “la necesidad de fortalecer la instalación de una misión permanente del Alto Comisionado en Caracas, dotada de recursos humanos y elementos que le permitan desplegar acciones correctivas”. En un documento de cinco páginas, los países expresaron preocupación y alarma por diversos aspectos de la crisis venezolana, incluidos temas como la inmigración masiva y la inseguridad alimentaria. Entre los países que votaron a favor, además de Argentina, estaban europeos como Alemania, España e Italia y sudamericanos como Brasil, Chile, Uruguay y Perú.
En la misma sesión, Venezuela Junto a los países aliados, presentó su propia resolución en la que destacó los “avances” registrados en el país recientemente, la cual fue aprobada por 14 votos a favor contra 7 rechazos. Hubo una mayoría de los 25 países que se abstuvieron, entre ellos Argentina.